REFLEXIONANDO MI PRÁCTICA....

La reflexión es un proceso complejo que implica para mí identificar y analizar aquello que incide en mi práctica.  El intento de reflexión más cotidiano para mí radica en el diario de trabajo, en donde diario registro las actividades realizadas, a veces es solo una descripción de actividades, a veces una narración detallada, pero muy pocas veces logro plasmar en él un análisis de la práctica que me lleve a un proceso de reflexión.

Para lograr avanzar en este proceso, es necesario contar con conocimientos previos acerca de la práctica profesional, qué dimensiones inciden en ella, como lo serían las dimensiones personal, institucional, interpersonal, social, didáctica, valoral.

En la necesidad de hacer un registro lo más fiel posible, grabé la situación implementada y luego realicé el registro, no transcribiendo los diálogos, pero si con base a las preguntas diseñadas para ello, este proceso me permitió observar de manera analítica mi propia práctica, las cosas que pudieron ser de otra manera, los momentos en que me desvié del propósito principal de la situación, los detalles en cuanto al mal uso del tiempo y materiales.

Existen diversos momentos en que se puede dar el proceso de reflexión, (PERRENOUD, 2007,p.32), la reflexión en la acción, sobre la acción, sobre el sistema de acción, y pude percibir en la grabación de mi práctica que me resulta realmente difícil reflexionar ante algún evento, tomar decisiones en plena acción cuando se requiere actuar inmediatamente o bien dejar de actuar en determinado momento para hacerlo después más tranquilamente, lo que ocasiona que me muestre algo inconstante, vacilando en algunas situaciones, ocasionando la pérdida de interés en lo realizado con los niños.

Perrenoud (2007) menciona diez razones por las cuales los docentes requerimos reflexionar sobre la práctica, algunas de estas razones me dieron una idea de lo que me puede aportar un intento por realizar de mejor manera mi diario de trabajo, que finalmente es una parte importante en la reflexión de la práctica.

Ser un docente reflexivo es importante para superar las carencias de la formación inicial, lejos de seguir quejándome de que no me dijeron como hacerle, el proceso de reflexión, análisis, búsqueda, debe ser parte de mis competencias para lograr encontrar las soluciones a las problemáticas que se presentan cotidianamente.  Descubrí que las experiencias que como docente voy teniendo, no han generado aprendizajes para mi práctica, por carecer precisamente del proceso de reflexión, por lo mismo, me topo continuamente con los mismos problemas, que la experiencia en sí misma no me garantiza un actuar diferente. Otro de los puntos que llamó mi atención fue el relacionado con una responsabilidad política y ética, pues en mi grupo suceden cotidianamente problemas entre los niños, y a veces entre las mismas madres, problemas que hasta ahora he tratado de resolver utilizando mis propios referentes, sin embargo observé la necesidad de actuar con responsabilidad y de manera justa, para lo cual requiero también realizar un proceso de reflexión.

Seguramente hace falta hacer una reflexión en más aspectos de mi práctica, vislumbro más cercana la idea de que el diario de trabajo es realmente un apoyo en este proceso, pues al analizar los registros, identifico aquellas problemáticas que se me presentan frecuentemente, y que de no reflexionar sobre ellas y buscar las soluciones posibles mediante un proceso ordenado, seguirán presentándose, registrándose o bien ocultándose, pero quedando solo ahí, en la poca memoria que tenga o en un cuaderno que quedará olvidado el ciclo que entra….